viernes, 29 de julio de 2016

Reseña sobre la adaptacion de THE KILLING JOKE


      Sabíamos que iba a ser difícil adaptar Killing Joke a un medio audiovisual. El comic en si ya es corto, por tanto, hora y media, incluso una hora es demasiado. La solución de DC entonces fue tomar el título y convertirlo en una historia de dos actos, donde en el primero se presentará un poco Batgirl, para que el desenlace del segundo fuera más significativo. Sin embargo, en el producto final ambas historias tienen tan poco en común que es igual a ver dos películas distintas. La verdadera Broma Asesina comienza en la segunda mitad y logran hacerla durar media hora aprox. Insertando el máximo de peleas y alargando lo más posible los diálogos.

      La idea de pegar dos piezas distintas con “la gotita” me molesta principalmente por tres razones: la argumental, la estética del texto y la estética de la retórica visual. Vamos por parte:

Si había que presentar a Batgirl en acción ¿No podía ser contra el mismo Joker? ¿No podía presentarse el detalle de su captura previa a la fuga, sembrar la semilla del desafío del Joker a Gordon, anunciar como un mal presagio el destino de Bárbara? Así las dos mitades no habrían parecido dos películas distintas.  Tal vez la respuesta está en el respeto a la obra original de dejarla intacta lo más posible. Si, puede ser. Porque en esa media hora que dura la real adaptación la cosa funciona.


       Luego está la estética del texto: la mitad que corresponde a la obra de Moore es mucho más densa, más compleja en cuanto a lenguaje. Argumentalmente el inglés busca ir más allá del factor de origen del superhéroe/villano clásico (por química, magia o alien). El origen de la maldad está en cualquier parte, en cosas tan comunes como el que alguien tome un aparato eléctrico y muera. Es terror sicológico. Todos tenemos vidas con frustraciones, más si nos vamos volviendo adultos, por tanto, podríamos estar a merced de un mal día para enloquecer. Y los diálogos refuerzan eso. Son más largos que lo habitual y con reflexiones más duras. En cambio, la primera mitad es demasiado común. Es mezclar una historia habitual de acción con una historia adulta, reflexiva. Por tanto, debieron haber hecho el esfuerzo para que la primera parte le haga un poco el peso a la segunda.

      Finalmente, la Broma Asesina está compuesta por un fino trabajo estético no solo en el dibujo de Brian Bolland, correctamente adaptado a la animación, sino por altos componentes de retórica visual, sobre todo las concatenaciones entre el presente y los recuerdos del Joker. Pasar del ayer al hoy llevado por imágenes similares, en medio de tonos oscuros, posiciones melancólicas o desesperadas, hacen no solo que simpaticemos con el Joker, sino que vibremos con la satisfacción de una obra bien hecha. Al menos así fue con la revista.


      Sin embargo, hay cosas buenas en esta adaptación. Las voces originales dan su mejor trabajo, en especial Mark Hamill como el Joker. Su voz puede ser aterradora como reflexiva. La animación está muy bien para el estándar de producciones similares, y la historia en su conjunto puede funcionar para un público no familiarizado con el comic en cuestión. Porque en este punto tengo que reconocer mis limitaciones: entiendo los desafíos de una adaptación, porque no implica reproducir textual una obra sino convertirla a un nuevo formato y un nuevo público. Y las adaptaciones animadas de obras tan emblemáticas como Dark Knight, Año Uno o Killing Joke son muy esperadas y muy criticadas por la devoción, lecturas y relecturas hechas al tebeo.

      Como sea, es una obra que vi con expectación, y que finalmente disfruté un poco. Le doy seis batarangs (de diez).
     Para Ladroncorps: El que te lo explica.
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1 comentario:

  1. la vi ayer con mi chica y a mi me gusto, ella no me dijo nada, creo que tambien , lo unico es que no queire admitir que una peli de dibujos le gustara

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